María Teresa, una humilde cocinera que laboraba en 1763 en un establecimiento de la plaza principal de esta ciudad para mantener a sus hijos, se resiste a reanudar una relación “ilícita” con Agustín Cesáreo, un hombre violento, “o has de ser mi amiga o te he de matar”, la acosa, le provoca lesiones, ella acude a las autoridades eclesiásticas y civiles, se abre una causa criminal que el agresor evade con argucias y fianzas, se le ordenó cubrir los gastos de las curaciones, pero la justicia no parece ir más allá.

Al organizar el Congreso Liberal de 1901 en el Teatro de La Paz, el ingeniero Camilo Arriaga tuvo un papel fundamental en el inicio de lo que después sería la revolución mexicana, influyó en el pensamiento y la acción de Juan Sarabia, Antonio Soto y Gama, Librado Rivera y de los Flores Magón, de los que se alejó por diferencias políticas, de su radicalismo que él mismo había incitado, y prefiere acercarse a Francisco I. Madero. En la década de los 30 del siglo pasado, enfrentó una situación económica precaria y buscó el apoyo del expresidente Plutarco Elías Calles, quien no se muestra muy receptivo, de esto hay constancia en cartas y telegramas. 

A principios de marzo partió Antonio “El Chino” Vallejo Loredo, fue un fotógrafo excepcional y promotor de la cultura, gran amigo y siempre solidario, participó en diversas luchas a favor de estudiantes, obreros y campesinos, dirigió impresos periodísticos y fue maestro de fotografía en el Cobach; para honrar su amistad y memoria, publicamos un semblanza de su vida.